jueves, 19 de junio de 2014

Del tamaño de todos los malecones



Ya no recuerdo la edad que tenía cuando lo descubrí. Era infinito, insoslayable, y de alguna forma se convirtió en mi referente de inmensidad, cuando todavía no sabía qué significaba eso.

TE QUIERO DEL TAMAÑO DE TODOS LOS MALECONES, PAPÁ…  así le dije un día a uno de los hombres más importantes de mi vida; y desde entonces, el Malecón es un símbolo para mi, y seguramente para todos los cubanos.

Si nos ponemos serios, habría que explicar que el Malecón Habanero comprende una amplia avenida de seis carriles, y un larguísimo muro cerca de 8 kilómetros) que se extiende sobre toda la costa norte de la capital. Cuentan que comenzó a construirse en los albores del siglo XX y se terminó unos cincuenta años después... pero nadie pensó nunca, que algún día, devendría una habitación más en la casa: un espacio para todos.

2 comentarios:

  1. Ciertamente, el Malecón es para muchos el salón donde compartimos con amigos, el portal donde esperamos a alguien amado, a veces hasta el comedor donde ingerimos algo para salir del paso...que bello recuerdo

    ResponderBorrar
  2. Gracias Habanera por compartir tus vivencias con nosotros. Nada como ese momento en que cerramos los ojos y respiramos profundos desde el Malecón HAbanero

    ResponderBorrar